lunes, 4 de junio de 2007

CALIDOSCOPIO



El otro día, en el homenaje a los jubilados del año 2006 en Málaga, me encontré al también homenajeado, Antonio Vergara Borrego, amigo y compañero tanto del Magisterio como del Seminario, maestro y poeta.
Le pregunté que si había publicado algo últimamente y me dijo que un libro de poemas titulado “Calidoscopio”.
- Hombre, Antonio, mándame un ejemplar.
Antonio tomó nota de mi dirección y he aquí, que a la semana siguiente lo tenía en mi casa. Me entregué a su lectura y lo despaché de un tirón. Ahora me toca releerlo y saborearlo.
Sin embargo, no me resisto a reproducir ub trozo del prólogo de Francisco Peralto y algunos de sus poemas:


En el prólogo, Francisco Peralto dice:
Antonio Vergara, se ciñe a un verso de metro clásico, donde el endecasílabo reina, junto al heptasílabo, con sobriedad senequista y aciertos que nos recuerdan en su musicalidad aquellos versos de Lope de Vega, la perfección de un Quevedo o la culta maestría de un Góngora.
La belleza de su poesía estriba en que sin salirse del marco de la tradición literaria vincula su palabra al canto germinal del pueblo, elevándolo a un concierto sostenido de forma que toda su poesía, es una ceremonia armoniosa. Logro conseguido por medio de emplear versos y composiciones como puede ser el soneto o la décima o, incluso cuando el poeta se expresa en verso libre, el ritmo interno, nos transporta a un recital de liras y clavicémbalos.



ANDALUCÍA TRÁGICA

A aquella Andalucía

Siempre sobre el yunque la pena cantando
De su pecho herido, de su pan escaso.
Andalucía…
Cristal de esperanza ya resquebrajado.

Pájaro de fuego que va malherido.
Toro bravo que se crece ante el castigo.
Andalucía…
La de los silencios, la de los olvidos.

Destripaterrones que la tierra labran
Y tan sólo abrojos les devuelve, ingrata.
Andalucía….
Dejos lastimeros que salen del alma.

Tan descerebrada, tan mustia, tan rota,
Que hasta se le olvida que ella fue la gloria.
Andalucía…
La voz clavellina de García Lorca.

Mariana Pineda, libertad tronchada.
Y aquel Blas Infante, padre de la patria.
Andalucía
Balas asesinas en la madrugada.


Quiero en este INRI con que cargas tú
Por ese clavario de sombra, sin luz,
Andalucía…
No ser cirineo: ¡quitarte la cruz!



¡AY, QUE SE FUE FEDERICO

A Federico García Lorca

Dejó al despuntar la aurora
Sobre patena de escarcha:
La flor de su calavera,
Y su aquelarre, y sus ansias,
Y su voz de almendras verdes,
Y su “quejío” de fragua.
Y su verso, vino amargo,
Y sus venas desangradas…
¡Ay, que se fue Federico,
Clavel de eterna fragancia,
Sin ver levantar el vuelo
Las libertades de España!

Porque cayó en surco fértil
Su semilla, grano a grano.
Ya aguardan los cuatro vientos
El fruto de su holocausto:
El laurel de la concordia,
La fe viva en el abrazo,
El imperio de la luz,
Y el puñal de un epitafio
Para las hordas infames
Que van tronchando a destajo
Primaveras de ilusiones
En campos desconsolados…
¡Ay, que se fue Federico
Mocito de mimbre y nardo
Sin ver crecer la simiente
Que su muerte había sembrado.



EL VINO DE TU VERSO

A Jorge Guillén

Valladolid, estrofa de fe pura,
Después de acuñarte en sus troqueles,
De oro revistió tus capiteles,
Forjándose el perfil de tu figura…

Luego El Perchel, marisma y galanura,
Te brindó sus biznagas, sus claveles,
El fuego de su abraza, sus caireles
Y, al expirar tu pecho, sepultura.

Hoy, mientras sendas latitudes besan
Tus lirios desangrados con pasión,
Que ya ni se baten, ni se embelesan,

El vino que se escancia de tu verso
Es sangre de una nueva redención
Que corana el amor al universo



BIBLIOGRAFIA:
OBRAS DE ANTONIO VERGARA:
Desde el pretil de la sangre (1989)
Álora eterna (1992)
Del agua enamorada (1994)
Historia de la Peña Flamenca de Álora(1995)
Calidoscopio (2006
)

Además de numerosas colaboraciones con artículos o poemas en diarios y revista de ámbito nacional y su obra ha aparecido en varias antologías como Verde-Blanco, etc.

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